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Alimentación Saludable

Receta de Pollo al Pesto Keto-Friendly | Eat This Not That

02/03/2021

Esta es una comida perfecta para la dieta cetogénica: pechugas de pollo cubiertas con queso mozzarella y salsa pesto. El pesto, hecho con albahaca, aceite de oliva, ajo, queso parmesano y piñones, añade a la cena grasas insaturadas ricas y saciantes, saludables para el corazón. Y el toque de pimienta de la rúcula, el tomate fresco y la cebolla roja son el complemento perfecto para la pegajosa mozzarella derretida. Si eres un fanático de la albahaca, esta receta de pollo al pesto podría convertirse en una de tus cenas semanales favoritas.

Otra razón para añadir esta receta a tu rotación de cenas semanales: Es sencilla y rápida de hacer, tanto en el horno como en la parrilla. Puedes cortar la ensalada mientras el pollo se hornea, y toda la receta sólo requiere una sartén. Y cualquier receta que requiera menos tiempo de preparación y limpieza es una victoria en nuestro libro.

Nutrición:
834 calorías, 56 g de grasa (26 g saturada), 1.235 mg de sodio, 9 g de fibra, 8 g de azúcar, 66 g de proteínas

Rinde 2 porciones

Índice

    Ingredientes

    Para el pollo
    4 pechugas de pollo deshuesadas y sin piel de 6 onzas
    2 cucharadas de aceite de oliva
    1/2 cucharadita de sal
    1/4 cucharadita de pimienta negra
    1/2 taza de pesto de albahaca
    4 oz de queso mozzarella fresco de leche entera, en rodajas

    Para el emplatado
    6 tazas de rúcula pequeña
    1/4 de taza de cebolla roja picada
    1/2 taza de tomates cherry cortados por la mitad
    1/2 taza de aceite de oliva
    2 cucharadas de vinagre de vino blanco

    Cómo hacerla

    1. Prepara el pollo. Precaliente el horno a 425°F. Forra una bandeja con borde con papel pergamino. Colocar las pechugas de pollo en la bandeja y cubrirlas con aceite, sal y pimienta. Hornee de 20 a 24 minutos o hasta que el pollo esté hecho (165°F).
    2. Cubra con queso. Cubra las pechugas de pollo con el pesto y el queso. Hornea de 2 a 3 minutos más o hasta que el queso se derrita.
    3. Emplata y sirve. Divida la rúcula y la cebolla en los platos de servir. Cubre con el pollo y los tomates.
    4. Rocíe. En un tazón pequeño, bata la 1/2 taza de aceite de oliva restante y el vinagre; rocíe todo.

    ¡Coma esto! Consejo:

    En lugar de simplemente cubrir las pechugas con mozzarella, puedes rellenar el queso en su interior. Presiona una mano sobre la pechuga de pollo e introduce con cuidado la punta de un cuchillo de chef en la parte más gruesa. Haz una abertura de unos 5 centímetros de ancho y luego corta tres cuartos de la pechuga para crear un bolsillo.

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